lunes, 27 de abril de 2009

Imágenes de la Catedral

El multifacético artista y amigo, Enmanuel Barquero tomó su cámara y se insertó en las magníficas ruinas para traernos estás bellas impresiones de lo que quedó de La Catedral Olvidada

Ojalá y les guste...

Archivo Steinbrugge

De la Colección Steinbrugge, estas fotografías fueron tomadas por un equipo de físicos alemanes y estadounidenses que se hicieron presente después de la hecatombe...


Qué bella estás Managua
Con las calles mojadas
Y tus pastos verdes.
Es mayo

Toda la ciudad está llena
De gotas de vida y aliento
Los escombros, los cauces, el mercado…
Ha llegado el invierno

No sos la misma de ayer, no,
Ahora estás preñada de vida
Que me hiere los ojos
Y me invita a seguir…

Por eso quiero
Llenarme de vos Managua
De tu frescura, de tu color
De tu caudal…


Me...

Preludio a Managua en B Flat


El poeta vanguardista José Román (1906 – 1903) denuncia en este poema cómo Managua perdía su identidad en los períodos de Intervención Norteamericana. Al parecer, la trasnculturización se apoderó no sólo de los asuntos militares, sino también de la creciente sociedad capitalina de aquel entonces. ¿Será que más de 50 años después ocurre lo mismo? Sólo que ahora no hay marines…

Preludio a Managua en B Flat

(Con acompañamiento de english)

Calles pavimentadas, carreteras
Y buses. Lagunas que sueñan con viejos poetas
Y un lago que ríe, que canta, que tiembla. Gentes elegantes;
Coches, carretones, indios, mendicantes,
Babies rascacielos de cemento armado,
Fresqueras
Fruteras,
Ambulancias, camiones, y siempre algo nuevo, algo
Inesperado

Anfibios, sikorskies, trimotores,
Alados equinos de la pampa azul
Celestes cantores
Aviones, aviones, aviones…
Muchos uniformes, pechos con medallas,
El canal, los yanquis y los liberales, los conservadores
Y todo política, locas ilusiones…
Leche pausterizada y Club y Jazz Band
Y por todas partes un English Spoken.
“Cuantos millones de almas hablaremos inglés”
Yes sir.

El Teniente Rotten, el capitán Dem
Coroneles Shark, Comandantes Dogs
Y los Generales y Ministros Hell
Rosados,
Uniformados,
Admirados,
Tatuados,
Yes sir.

Managua, Managua ya estás civilizada.
Tu traje de kaki; tu gente, todo es extranjero
Hasta tu catedral es importada…
Pronto en ella veremos un Dios English Speaking
Ya estás civilizada
Yes Sir.

Tus bellas damitas saben de cultura:
No tienen noviazgos, tienen otras gracias… triviales
Platican de Cine, de Moda, de Sexo… son muy
Liberales.

Se divorcian, se casan, están a la altura.
Sólo algunas pocas siguen atrasadas
Y no fuman ni beben cocktails
Yes Sir.

Managua, Managua con tu bello lago
Que anfibios fumigan con verde París
Higiene… Sin mosquitos dormirá con calma
El Gran Momotombo, tu gran centinela
Mientras te oxigenas y cortás el pelo,
Cuando se despierte le dirás: No Spanish… Malecones,
Zoos
Golf y Country Clubs
Canal Zone, German, French English Spoken…
Managua.
Yes Sir.

1931.

martes, 21 de abril de 2009

La catedral olvidada



Mi primera nota de portada fue dedicada a la Catedral cuyas ruinas yacen en el olvido...

Gabriela Castro
END - 10:50 - 05/05/2008


***Sólo una persona cuida el local, expuesto al vandalismo

A orillas del Lago Xolotlán, en la antigua Plaza de la República, está uno de los edificios más emblemáticos de la capital, que data del siglo XX, la Catedral Santiago, de Managua, símbolo del neoclasicismo en el país y del recuerdo vivo de lo que destruyó el terremoto del 23 de diciembre de 1972. Sin embargo, su estado es lamentable. Está abandonada y ha sido protagonista de varios conflictos por su resguardo y administración.

La Catedral fue cerrada al público a partir del primero de noviembre de 2000, para evitar los riesgos de derrumbes, posiblemente después de la actividad sísmica que afectó a Masaya en junio de ese año.

El inicio de su construcción data de agosto de 1929, según el diseño de A. Masure y A. Van Gaver, arquitectos belgas. La empresa “Les Ateliers Metallurgiques” fue la encargada de la ejecución del proyecto de edificación, bajo la dirección del ingeniero Pablo Dambach. La estructura de hierro fue importada totalmente de Bélgica vía marítima, a través del Puerto de Corinto. La obra culminó en 1938 con un costo total de 89 mil 94 dólares, y fue consagrada el 25 de julio de 1946 por el Arzobispo de Managua de entonces, monseñor José Antonio Lezcano y Ortega.

Sin daño estructural

El terremoto de 1931 no afectó la Catedral, pero sí los edificios de los alrededores. El templo sólo tenía en pie su estructura metálica. Fue el terremoto de 1972, el que la inutilizó debido a que quedó fracturada, y como detalla el primer informe de daños, emitido por la comisión evaluadora de situación estructural de 1974, la Catedral no corría riesgo de colapso, aun con un terremoto de igual magnitud, pero el sitio no brindaba seguridad para la frecuente aglomeración de personas, por ello recomendaban la demolición.

También, el terremoto de 1972 permitió conocer la cantidad de fallas existentes en Managua, a través de estudios frontales, tal es el caso de la “Investigación de fallas activas de Managua y sus alrededores”, realizado por una constructora norteamericana, y publicado en 1975. Dicho informe determinó que la Catedral está rodeada por las “Fallas de los Bancos” y la “Falla del Estadio”, esta última causante del seísmo de 1931.

Según Roberto Sánchez Ramírez, Director de Patrimonio Histórico de la Alcaldía de Managua y miembro de la Academia de Geografía e Historia de Nicaragua, la Catedral ha sido objeto de varios informes y estudios de países como Brasil, España, Cuba y México. “Es una Catedral bien estudiada”, alega.

Es posible recuperarla

Todos los informes recalcan que la Catedral puede ser reconstruida, pese a que tiene rotos los arcos y muchas grietas por oxidación, principalmente en las escaleras y las vigas. Específicamente presenta un alto nivel de corrosión, así como rotura de paños, y las torres están dañadas, en especial la norte.

Sánchez analiza que para lograr este propósito es necesario que “haya unificación de criterios de restauración, un análisis presupuestario y definitivamente, establecer el propósito de la reconstrucción.”

“Personalmente, apoyo la moción de que la Catedral sea convertida en la sede del Museo Nacional de Arte Sacro o del Museo Arquidiocesano (...); lógicamente, debe definirse una comisión en la que deben estar representados todos los sectores involucrados: el Instituto Nacional de Cultura, Instituto Nacional de Turismo, la Alcaldía, el Colegio de Arquitectos de Managua, también es importante que el Arzobispo de Managua tenga un representante y algunos sectores profesionales (universitarios, escuelas de arquitectura), para que se determine en qué condiciones está la estructura”, agrega Sánchez.

Antonio Álvarez, de la Dirección de Geología Aplicada del Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales, Ineter, explica que la última comisión que recibió el ente fue la de México, gracias a la visita del ex presidente Vicente Fox, en marzo de 2004, quien prometió financiamiento y apoyo para la restauración. “La visita de los ingenieros mexicanos fue solamente para evaluar la Catedral, que es una construcción vieja y muy bien hecha, pero que tiene cierto deterioro cultural y estructural”.

“Nosotros recomendamos sobre la peligrosidad de las fallas, pero los encargados tienen la última palabra, eso va a depender del financiamiento y de las técnicas que usen para asegurar la construcción”, puntualiza Álvarez.

¿Quién la administra?

Realmente, no se sabe quién es el encargado de la administración de la antigua Catedral. Se supone que está en manos del INC. Aunque el terreno pertenece al Estado, gracias al decreto de confiscación de las áreas afectadas por el terremoto, efectivo desde 1973. No obstante, el edificio pertenece a la Iglesia Católica.

Sánchez comentó que la Arquidiócesis de Managua ha solicitado recientemente la donación del terreno, para conservarlo como patrimonio de la Iglesia Católica, sin embargo, no ha habido respuesta por parte del INC.

¿Dónde está lo que donó Japón?

A finales de los años 90, el gobierno del Japón donó a la Catedral un sistema de audio para música gregoriana, así como luminarias. Pero todo desapareció “misteriosamente” y ninguna institución investiga el hecho.

Asimismo, también desapareció una de las carátulas de los relojes que decoraban las torres, precisamente el que marcaba la hora exacta del terremoto. “¿Cómo es posible que la carátula haya desaparecido?”, reprocha Roberto Sánchez.

Por cierto, una de las maquinarias del reloj de la torre sur se oxidó porque la guardaron en el sótano del vecino Palacio Nacional, hoy Palacio de la Cultura, administrado también por el INC.

No se pudo obtener la versión de la licenciada Blanca Aráuz, Directora de Patrimonio Nacional Histórico del INC, ubicado en las ruinas del Gran Hotel, sobre esta afirmación.

Valor incalculable

Al visitar la Catedral, se percata el estado de abandono de las ruinas: la basura, el pasto y residuos de materiales de construcción están presentes en todo el terreno. Toda el área es vigilada por una sola persona, lo que deja el templo expuesto al vandalismo y a la destrucción, tal como ocurrió en los años posteriores a 1972.

Por otra parte, la fachada del templo está cubierta por un enorme letrero de la Presidencia de la República, color rosado, que decora el sitio donde antiguamente estaba la fuente musical y ahora es un parque de ferias.

La Catedral Santiago posee un rico valor cultural, histórico y social, no sólo para Managua, sino para todo el país.

Igualmente, el templo era punto de referencia estratégico para la ciudad, ya que estaba ubicado en el centro histórico de la capital. Allí se hacían los grandes mítines en contra de la dictadura militar somocista.

La Catedral fue el primer templo tomado por los estudiantes “para protestar contra el gobierno de Somoza, era la primera vez en la vida política de este país que ocurría una cosa semejante”, recuerda Sánchez. Y fue testigo del triunfo de la revolución, cuando el 20 de julio de 1979 entraron todos los frentes guerrilleros a Managua.

Otro aspecto interesante es que sirvió de sepultura para notables personajes de la sociedad nicaragüense, como monseñor José Antonio Lezcano y Ortega, monseñor Alejandro González y Robleto, ambos arzobispos de Managua. También guardó los restos de José Dolores Estrada, así como de miembros de las familias más sobresalientes de Managua. “Eran personas que fueron enterradas en gratitud porque las familias daban apoyo económico a la Catedral”, rememora Sánchez.

Álvarez recalca que “la Catedral de Managua, así como el cerro Motastepe y la laguna de Tiscapa, son los sitios símbolos de la ciudad y de nuestra identidad capitalina”.

http://www.elnuevodiario.com.ni/nacionales/14865

Por si no sabías…



• En Managua habían buses sin techo llamados “pelones”, como los populares autobuses londinenses (nada más que los de Londres son de dos pisos), en los cuales era divertido recorrer la Calle 15 de septiembre y otras arterias principales de Managua.

• En las principales avenidas habían parquímetros, otra muestra de la corrupción de la Dictadura de los Somoza (1936 – 1979), principalmente en el período de Anastasio Somoza Debayle. Estos cobraban 10 centavos.

• El Teatro Nacional Rubén Darío fue construido bajo pedido de la esposa de Anastasio Somoza Debayle a finales de los años 60 porque la ciudad necesitaba “diversión de categoría”. Hope Portocarrero logró su cometido, no sin recibir las críticas de snob y clasista por los intelectuales de la época.

• Howard Huges, el conocido aviador estadounidense vivió en el sexto piso del Hotel Intercontinental (hoy Crowne Plaza) por muchos años gracias a negocios con altos funcionarios, pero después del gran sismo salió corriendo del país y nunca volvió

• Las primeras escaleras eléctricas estaban en el Almacén Carlos Cardenal S.A y fueron toda una novedad para los habitantes de Managua.

• En la víspera del terremoto, se realizó una vigilia – protesta en las afueras de la Catedral Santiago de Managua por la campaña “Navidad para los presos políticos”, para garantizar condiciones dignas a los jóvenes capturados por la Guardia Nacional por actividades subversivas y “comunistas”.

• José Santos Zelaya trajo los postes de luz y el alumbrado eléctrico gracias a la Libérrima de 1893.

• La Iglesia Santo Domingo, ubicada en el barrio del mismo nombre es una obra de arte elaborada por nuestro reconocido pintor y escultor Rodrigo Peñalba.

• El invierno más pobre del que se tiene memoria fue en el año 1972, provocando que el lago Xolotlán pierda su nivel más rápido desde entonces. Esta es una causa del terremoto, por increíble que parezca.

• Managua fue habitada por primera vez hace 6,600 años según recientes investigaciones. Las huellas de Acahualinca son la mejor muestra de ello y fueron descubiertas en los años 20.

• El patrono de Managua fue Santiago Apóstol, del cual se puede apreciar su imagen en la parte frontal de la antigua catedral. Luego su fiesta fue perdiendo auge gracias a la popularidad de Santo Domingo de Guzmán y los milagros concedidos a los pobladores, sobre todo por la peste del cólera.

• En la Cafetería La India se reunían lo mejor de la poesía nicaragüense y la efervescente oposición juvenil sandinista y la no también. En este punto de reunión desfilaron grandes como Ernesto Cardenal, Carlos Martínez Rivas, Carlos Alemán Ocampo, entre otros. Después del terremoto no se reinauguró, como muchos otros lugares.

• El jugador de grandes ligas puertorriqueño Roberto Clemente murió en un accidente aéreo. Su avioneta cayó en el caribe cuando traía donaciones a los damnificados del terremoto el 31 de diciembre de 1972.

• Para el terremoto de 1972, la mayoría de los edificios se derrumbaron sobre sus bases. Esto se debe a las ondas sísmicas que provocaron un efecto de gravedad doble y los edificios soportaron su propio peso dos veces. Raro.

• En los pocos barrios de Managua ricos, pobres y miserables convivían en la misma calle, es decir, que la sectorización económica no exixtía en la primera mitad del siglo XX.

La Managua que nos conocimos...



Por Gaby Castro

Desde pequeña me invade la curiosidad de esa majestosa ciudad que murió el 23 de diciembre de 1972, cuando el seísmo de XX.X grados en la escala de Richter, apagó la llama de más de 10 mil almas y destruyó el 95% de la Leal Villa de Santiago de Managua.

Creo que esto es debido a la nostalgia con la que evocan sus antiguos moradores, nuestros abuelos y en algunos nuestros padres. Es admirable el brillo que llena sus ojos cuando la capital arrasada es la protagonista de sus memorias y tiempos juveniles, en los cuales fueron felices… y mucho al parecer.

Y no es para menos, Managua era considerada la capital más bonita y próspera de toda la región centroamericana. Nos perdimos de una ciudad de luces y sombras, donde no faltaba el arte, los sueños y mucha vida, manifestada en los que se quedaron y lo no derruido, el espíritu inquebrantable que nos caracteriza como habitantes de la “ciudad de los estanques”*

No conocimos la ciudad de los aleros, de helados en los parques, del ferrocarril y su andar, de los caballeros y las muchachas de vestidos bonitos, de mercados alegres, de sencillez… en fin, de muchas otras cosas que daremos vida gracias al poder de la imaginación.

He aquí el poder de las imágenes, de la música, de la literatura y de los relatos. Ellos serán los acompañantes perfectos para recordar y vivir todo aquello que nos fue arrebatado por la naturaleza y sus fuerzas. Como habitantes de Managua y porqué no, de toda Nicaragua, es preciso conocer la memoria de lo que yace bajo nuestros pasos y que sólo pocos edificios grises ayudan a evocarlo.

Por esto, la vitalidad de recoger todo vestigio que me asocie mentalmente a Managua la bella; aquella que sucumbió ante el dolor y la desgracia y dejó con un mal sabor de boca eterno a los sobrevivientes y que causa curiosidad a mi y a otros tantos cuando se evoca ese episodio de nuestra historia.

*Significado de la palabra Managua en Náhuatl

sábado, 4 de abril de 2009

Postales


Aquí están las postales que muestran
A Managua destruida por el terremoto.
Ante mí las tengo en mi mesa.
Las voy examinando. Calle del Club Internacional
Y Hotel Supone. Casas semiderrumbadas, escombros
En las aceras. Parte de una reja de hierro.
Al fondo una palmera solitaria
Y donde termina la calle
Al centro, las ramas inmóviles de un árbol

Calle de los mercados. Es indecible lo que se ve.
Lo que no se ve. Está cubierta de piedras,
Trozos de vigas, palos y tablas. Hay un grupo de
(Personas.

Varias sentadas, tres de pie.

Testigos mudos de la tragedia.

Se ve un hombre de camisa blanca, corbata, sombrero
(De paja.

En Calle del campo
Entre las ruinas
Dos carros aplastados por los derrumbes.

Aquí aparece una vista general.
Managua, literalmente
Es una ciudad bombardeada. A un lado
Restos de pared aún en pie, después nada.
Al otro, esqueletos de casas.
Por toda la calle, hasta la Roma, escombros diseminados.

Era yo muy niño. Tengo pocos recuerdos de la catástrofe.
Mi padre, en Santa Lucía, andaba a caballo en el potrero
(De la costa
Contaba cómo vio levantarse una inmensa ola lago adentro
Mientras las ramas de un árbol fuertemente sacudido
Le aventaban los anteojos
Tuvo que desmontarse para recogerlos

Esta imagen me queda. Pasa una carreta
Frente a mi casa. Llevan a un hombre con ambas piernas
Destrozadas. No se sabe si ya muerto.
Foto Cisneros, Foto Alegría, dicen las postales.

Salvador Murillo – “Los presentes del Sol”. 1974

“La horrible noche estrellada”


Esa tarde del 23 de diciembre de 1972, los capitalinos vieron llegar la noche con un temor inaudito. Las primeras armas empezaron a relucir en el cinto de los jefes de familia. Todo mundo se armó. Por algún motivo, la luz del día daba un poco más de tranquilidad en medio de aquella desolación. Las tinieblas de la noche cayeron con una pesadez extraordinaria, de terribles presentimientos.

A las 7 de la noche, la oscuridad se hizo total, y un cielo estrellado, maravillosamente estrellado, cubrió Managua, sus escombros, sus incendios y sus millares de personas atontadas, empavorecidas, indecisas.

Esa noche del 23 al 24 fue algo extraordinario. Una noche bellísima y tenebrosa. Entre los escombros, en las aceras, en los hospitales improvisados, la gente no podría reconocerse en medio metro de distancia. Seguía temblando. Ni una sola luz rompía la oscuridad.

En los grupos organizados para acampar la gente se reconocía sólo por la voz y tardaban en orientarse, buscándose. Arriba brillaban las constelaciones. Mundos lejanos. Es imposible, ante ese espectáculo y cuando la gran hoguera de incendios de Managua había vuelto a encenderse, imaginarse un grupo humano, como los habitantes de Managua, tan recluidos, tan indefensos, tan patéticamente solos en su desgracia inmensa. Era un inmenso naufragio de 400, 000 personas, flotando en un cascarón carcomido en medio de una noche tan imponente que era imposible ver a simple vista a miles de años luz de distancia.

En esa noche, todos los habitantes de Managua conocieron la muerte; unos, la definitiva. Otros, una breve muerte espiritual de encogimiento, de no saber qué hacer… se piensa en el fin inminente de la vida, en una agonía lenta, sin agua ni comida y quizá en sí estamos listos para pasar a la otra vida.

Horacio Ruiz. Tomado de la primera edición de La Prensa que salió al mercado (marzo 1973) después del la hecatombe.

Lamento Náhuatl


Luego del terremoto de 1972, alguien escribió sobre una pared sobreviviente de Managua…

“Quin oc ca tlamatli noyollo”
Hasta ahora lo comprende mi corazón

Luché
Toda la noche
(¡Mira mis manos hechas sangre!)

Luché
Toda la noche
Para salir de la tierra
¡Ay!
Cuando ya fuera
Me creí libre
Miré en el muro
La efigie del tirano

Si alguien sabe o conoce al autor de estas letras maravillosas, avísenme…